Sandra Milena Araque Patiño, primera mujer en ocupar un cargo operario en la planta Lux Duitama
Con esfuerzo, disciplina y una determinación que inspira, Sandra Milena Araque Patiño se convirtió en la primera mujer en asumir un rol operario en la planta Lux Duitama. Su historia representa mucho más que un logro personal: es un símbolo de transformación, inclusión y empoderamiento femenino en la industria. Sandra abrió camino para que más mujeres sueñen con ocupar espacios que antes parecían lejanos.
En esta entrevista, Sandra nos comparte cómo fue su recorrido, qué la motivó a desafiar los estereotipos y el mensaje que quiere dejar a quienes sueñan con seguir sus pasos. ¡Te invitamos a leerla y dejarte inspirar por su valentía!
- ¿Qué significa para ti ser la primer mujer en un cargo operario dentro de la planta Lux Duitama?
Para mí ser la primera mujer en un cargo operario dentro de una planta industrial es mucho más que un logro personal, es un símbolo de transformación para toda la industria. Me siento orgullosa de abrir camino para que más mujeres vean que sí es posible estar en los espacios ocupados tradicionalmente por los hombres.
- Cuéntanos un poco de ti ¿Cómo comenzó tu carrera profesional?
Después de graduarme del colegio, comencé mi camino laboral en un asadero, donde trabajé durante siete años. Posteriormente me trasladé a Bogotá en busca de nuevas oportunidades.
- ¿Qué te motivó a regresarte a Boyacá?
Sentía que era el momento de avanzar y de asumir nuevos retos. Volví con la convicción de construir algo más grande para mí y para mis hijos. Y así fue como empecé a trabajar en el proceso de redención de tapas de bebidas como Natumalta, Andina y otras marcas por medio de la empresa temporal Más Actitud.
- ¿Cómo fue ese acercamiento al trabajo dentro de la planta?
Desde mi lugar de trabajo observaba con atención a los operarios de planta. Me inspiraban. Soñaba con vestir con orgullo ese uniforme y estar dentro del equipo. Esa idea se convirtió en una meta personal.
- ¿Cómo lograste vincularte de forma directa a la compañía?
Fue gracias a mi trabajo constante, disciplina y ganas de aprender. Me esforcé por hacer bien mi trabajo y destacarme en las actividades diarias, mostrando mis capacidades para asumir más responsabilidades. Con el tiempo recibí la invitación a vincularme directamente al equipo de la planta Lux Duitama, donde asumí funciones en puntos de canje, inventario y recepción de vehículos, y actualmente hago parte activa del equipo de planta en el área de manejo de alimentos de la multicategoría.
- ¿Cómo lograste equilibrar tu vida laboral con tu rol de madre?
No es fácil, pero es posible. Mis hijos son mi mayor motivación. Cada paso, que doy en el trabajo también es un paso a un mejor futuro para ellos.
- ¿Qué mensaje le darías a otras mujeres que quieren abrir camino en la industria?
Que crean en ellas mismas, que no se limiten por estereotipos o miedos. Las mujeres somos capaces de lograr todo lo que nos proponemos. Con esfuerzo, resiliencia y actitud, podemos estar donde llegar donde lo imaginemos.
- Como cierre, ¿qué significa para ti ser parte de una empresa que apoya el crecimiento profesional femenino?
Me llena de orgullo. Postobón no sólo abre puertas, también cree en nuestro talento. Ser parte del cambio me motiva a seguir creciendo y a inspirar a otras mujeres a hacer lo mismo.
La historia de Sandra es una muestra viva de que en Postobón no existen fronteras de género. Creemos en el talento, en la actitud y en el poder de transformar realidades desde cada rol. Su camino nos inspira a seguir construyendo una industria más equitativa, donde todas las personas puedan crecer, aportar y soñar en grande.





























