Somos Fundación Grandes Corazones
En el mes de la madre, las homenajeadas por partida doble son las mujeres que deciden prestar sus vientres para que la maternidad se multiplique para parejas que clínicamente no pueden concebir de manera natural.
La primera motivación de una mujer cuando decide hacer el proceso es dar la oportunidad a una pareja o a una persona soltera, de experimentar el amor más grande que existe y que es aquel que se siente cuando uno recibe a su propio hijo al nacer. Vienen detrás otros motivos personales, pero al ser madres ellas mismas y al saber lo que significa ese amor, nos damos cuenta de que la generosidad es el motor y primera razón de estas heroínas. Una madre es generosa por naturaleza y aquí esa generosidad, se multiplica por dos ya que no solamente ella volverá a experimentar cambios en su cuerpo, con una criatura no suya, sino que además hará que ese sentimiento sea experimentado por personas que nunca pensaron que podrían sentirlo en carne propia y que, si alguna vez lo imaginaron, llevan años esperando a esta persona que les va a dar esta posibilidad.
Además, sumemos la emoción cuando estas mujeres ven que ese esfuerzo físico y emocional se verá compensado de alguna manera con los auxilios y alianzas que ha ido creando la fundación para ellas: ni se lo esperaban. Lo hacen por un ideal altruista difícilmente entendible. No es fácil ver transformarse su cuerpo, no es fácil aguantar las molestias, el peso, el cansancio y la falta de dueño y, sin embargo, lo hacen con amor, como si el bebé fuera de ellas.
Entienden al 100% la responsabilidad que tienen. Se cuidan más que con sus propios hijos. Entienden la felicidad que brindan y eso es lo que apoya la Fundación. Esos gestos humanos tan grandes, tan increíbles, tan maternales.
- La FUNDACIÓN GRANDES CORAZONES nace en febrero de 2020 con el propósito de apoyar a las gestantes subrogadas colombianas a fortalecer su núcleo familiar y superarse mediante capacitación y relacionamiento con las instituciones pertinentes. Tiene la misión de acompañar en el proceso de subrogación a la beneficiaria y a su familia, como ejes prioritarios de nuestros procesos que son concebidos enalteciendo los valores humanos de igualdad de oportunidades, no discriminación, protección de la familia como eje de la sociedad y dignificación de los oficios artesanales, como símbolo de la identidad cultural colombiana y como una opción de aumentar los ingresos familiares.