#NoSoyUnObjeto – El porqué
Todos señalamos a un agresor, todos condenamos a un violador, pero el peor enemigo está en la casa, en el colegio, en la iglesia, en las empresas, en la política… Y se llama micromachismo.
Sutiles e imperceptibles maniobras y estrategias de ejercicio del poder de dominio masculino en lo cotidiano, que atentan en diversos grados contra la autonomía femenina.
El micromachismo se encuentra más arraigado en generaciones más adultas, personas más religiosas y con menores niveles educativos.
Fuente: https://cerosetenta.uniandes.edu.co/el-machismo-en-numeros/