Únete a la campaña #LaEscuelaDeMisSueños de Comparte Por Una Vida
Comparte Por Una Vida te invita a que te unas al #GivingTuesday y dones para replicar y fortalecer el modelo ‘Quédate en la escuela’ en más instituciones educativas de Norte de Santander.
1 de cada 3 niños migrantes nunca ha pisado una escuela colombiana.
¿Quieres transformar la vida de jóvenes migrantes? ¿Tú también, crees que la educación digna es el motor del cambio?
¡Dona aquí!
Juntos, con tu ayuda, la organización Comparte Por Una Vida podrá empoderar a la población joven migrante al garantizar una educación digna a niños y niñas de un asentamiento del Norte de Santander, región colombiana fronteriza con Venezuela. Con tu donación, puedes ayudar a dotar de útiles escolares y renovación de infraestructura a todo un colegio comunitario. ¡Los niños y niñas migrantes tendrán condiciones óptimas para ir a estudiar y transformar sus vidas!
Gracias a TU participación:
- Con $20 USD: Apoya a que 5 niños y niñas migrantes reciban Kits con Útiles Escolares para garantizar 6 meses de su escolarización.
- Con $60 USD: Apoya a que 15 niños y niñas migrantes reciban Kits con Útiles Escolares para garantizar 6 meses de su escolarización.
- Con $110 USD: ¡Ya lo tienes! ¡Permites la renovación de 1 aula entera y que 30 niños y niñas migrantes sean recibidos en un salón de clase digno!
La migración es un determinante social que aumenta las desigualdades en el acceso a la educación digna, negando del mismo modo la garantía de un futuro seguro.
¿Cómo así que la migración es una barrera a la educación digna?
El derecho a la educación es una de las causas principales por las que las familias deciden huir de Venezuela con sus hijos: queriendo ofrecer un futuro digno a sus hijos, deciden iniciar su ruta migratoria. Pero ¿conoces el número de niños y niñas migrantes que, al llegar a Colombia, nunca tendrán acceso a la escuela? En el 2020, eran 80.000. Es decir, el 30%. Los cupos limitados debido a instalaciones precarias no permiten integrarlos. En asentamientos irregulares, se calcula que 70% de niños y niñas nunca han pisado el suelo de una escuela colombiana. La negación del derecho a la educación afecta directamente el bienestar, la protección y la dignidad de los niños y niñas migrantes, creando barreras en el acceso al trabajo formal, y a un futuro sin pobreza.
¡Queremos que cambie! Y eres parte de la solución.